El fabricante de motores de aviación anunció un principio de acuerdo con Air bp para desarrollar líneas de trabajo e investigación con combustible de aviación sostenible (SAF). El objetivo principal es lograr el suministro combustible SAF de hasta en un 100% en las pruebas de motores de Pratt & Whitney. El acuerdo refleja el compromiso de la firma estadounidense para apoyar el ambicioso objetivo de la industria aeronáutica de alcanzar cero emisiones netas de CO2 para el año 2050.
“La industria de la aviación comercial debe utilizar múltiples enfoques cuando se trata de abordar los desafíos de lograr una aviación más sostenible. Una oportunidad inmediata es reducir radicalmente nuestra dependencia de los combustibles fósiles, como es el caso del queroseno, mientras continuamos mejorando la eficiencia de los motores”, dijo Graham Webb, director de sostenibilidad de Pratt & Whitney.
Como parte del acuerdo, ambas compañías trabajarán en colaboración para explorar el suministro de hasta un 100% de SAF para las pruebas de motores hasta el año 2024. Además, las dos empresas pretenden colaborar en la investigación y monitorización del rendimiento de los motores alimentados exclusivamente por SAF, para comprobar que efectivamente se logra una reducción de las emisiones.
Andreea Moyes, Directora de Sostenibilidad de Air bp, dijo: “Estamos encantados de trabajar con Pratt & Whitney para probar SAF en los bancos de prueba de motores de EE.UU. A medida que continuamos desarrollando nuevas tecnologías y materias primas será muy útil para ambas compañías colaborar en las pruebas e interpretar correctamente sus resultados”.
En combinación con los continuos avances tecnológicos en la eficiencia de las aeronaves y los motores, el combustible SAF tiene un papel fundamental en la descarbonización del transporte aéreo, al reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Pratt & Whitney ha participado activamente en las pruebas y la certificación de SAF durante más de una década y ayudó a las autoridades reguladoras a establecer los estándares que hoy permiten que SAF se use como combustible «directo», mezclado hasta en un 50 por ciento con combustible de queroseno convencional.
Con este acuerdo, Pratt & Whitney continua trabajando para validar que sus motores puedan operar con 100 por ciento SAF y la compañía continúa colaborando estrechamente con la Iniciativa de Combustibles Alternativos de Aviación Comercial (CAAFI) y ASTM International para lograr ese objetivo. Igualmente, la compañía trabaja para que las futuras generaciones de motores estén listas para funcionar con un 100% de SAF, incluido el motor GTF AdvantageTM.
Desde que entró en servicio en 2016, la familia de motores Pratt & Whitney GTF ha ahorrado a los operadores más de 600 millones de galones (dos mil millones de litros) de combustible y ha evitado más de seis millones de toneladas métricas de CO2. Además de permitir un mayor uso de SAF, Pratt & Whitney está desarrollando una gama de tecnologías para impulsar mayores reducciones en las emisiones de CO2 de los futuros diseños de aeronaves, incluidas tecnologías de turbinas de gas más avanzadas, sistemas híbridos eléctricos y tecnologías de combustible de hidrógeno.