La aerolínea española realizó el pasado viernes su vuelo más ecológico, con el objetivo aportar soluciones para reducir el impacto de la aviación en el entorno. Esta iniciativa se enmarca en el desafío “The Sustainable Flight Challenge” (El Reto del Vuelo Sostenible), que la alianza SkyTeam ha lanzado a sus aerolíneas asociadas.
Inspirado por las competiciones aéreas que unieron Melbourne y Londres en 1934, “The Sustainable Flight Challenge” busca unir al conjunto de la industria aeronáutica para tomar medidas inmediatas que ayuden a desacelerar el cambio climático.
La finalidad es que el sector acelere la innovación y el cambio reduciendo al máximo el impacto medioambiental de la huella de carbono y difundir ideas transformadoras que puedan compartirse con el resto de actores del sector.
Consiste en una competición amistosa entre las compañías de la alianza. Pueden participar en 14 categorías diferentes con el objetivo de que las más exitosas se lleven a la práctica de forma constante, siempre que sea posible.
El pasado 6 de mayo un Boeing 787-9 Dreamliner, con capacidad para 339 pasajeros, voló entre Madrid y Gran Canaria empleando parte de biocombustible SAF (Combustible de aviación sostenible) para alimentar sus dos motores. La compañía adquirió el biocombustible producido a partir de aceite vegetal en la refinería de Petronor en Bilbao.
La operativa de este vuelo, para el que se trabajó en su ruta más eficiente y que contó con tripulación paritaria, incluyó también un procedimiento en tierra más sostenible. Groundforce, empresa de servicios aeroportuarios de handling, utilizó sus vehículos dotados de la última tecnología para todas las operaciones de tierra que rodean la salida y la llegada de un vuelo.
A bordo, Air Europa activó muchas de las prácticas sostenibles que ya son habituales en su operativa. Una de ellas fue el uso de materiales biodegradables, como fase previa a la progresiva y total implantación del “plástico cero a bordo”, así como la correcta segregación de residuos, medida que la aerolínea aplica desde 2006 no solo en sus oficinas, sino también en todos sus vuelos.
Durante la operativa, se ofreció un menú sostenible y saludable, elaborado con productos de temporada y de kilómetro cero, con los que se refuerza el cuidado del medio ambiente y se potencia la economía circular.
Igualmente, se invitó a los pasajeros a efectuar el check-in online y a bordo se realizó una encuesta de satisfacción a los pasajeros, utilizando papel de usar y plantar, con el que posteriormente se creará un pequeño jardín en la sede de la compañía.
Air Europa recuerda que ya aplica múltiples prácticas que le han permitido mejorar la eficiencia de sus vuelos y cumplir con el objetivo estratégico de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) de reducir un 2% anual el total de emisiones de gases de efecto invernadero. Entre ellas se encuentra la creación de una aplicación de datos para el registro y control de los consumos de combustible y las emisiones asociadas.
Otras medidas son la implantación del proyecto Electronic Flight Bag, la creación de un comité de combustible periódico, la aplicación de procedimientos operativos más eficientes en todas sus flotas o la participación en grupos de trabajo del sector aéreo.