La poderosa tormenta de nieve que azota el noreste de EE.UU. ha provocado la cancelación de más de 3.500 vuelos. De acuerdo a los datos proporcionados por Flightaware.com, en los tres principales aeropuertos de Nueva York se han cancelado cerca de 1.000 operaciones. En Boston, hub de JetBlue y Delta, suman alrededor de 300.
Aparte de la nieve, que lógicamente complica mucho la operatividad de los aeropuertos, las rachas de viento superan los 30 nudos y en algunos momentos se han alcanzado valores de huracán. Debido a la acumulación de hielo y nieve en todas las instalaciones, es de prever que se tarde en recuperar la normalidad pues en estos casos los aeropuertos restringen mucho las operaciones para garantizar la seguridad. Ello se hace incrementando la separación entre aeronaves y priorizando las operaciones en aquellas pistas de vuelo y rodaduras que estén en mejores condiciones.